Capítulo 40. Todo un desastre
[ARI]
El ojiazul sonrió.
—Sí podemos. No estamos en horario de clases y tampoco en el salón…
—Pero sí en la biblioteca, dentro de la universidad.
—Pero quiero que todos sepan que eres mía, nena…
—¡¿Estás loco?! Acabas de entrar a trabajar y ¡Oh, sorpresa! ¡Eres mi profesor!
—¿Y? No es como si te subieran las notas en la boleta al final del ciclo.
—No, pero puede malinterpretarse.
—Qué lo malinterpreten —se encogió de hombros.
¡Rayos! ¡¿Por qué era tan cabeza dura?!.
—Ari ¿Estás aquí? —los pasos de Nina se volvían más cercanos.
Miré a Daniel, quien parecía muy relajado, le di un golpe en los bajos y me miró mal, antes de caer al piso, casi llorando.
—Lo siento, amor.
Ordené mi cabello lo mejor que pude y jalé a Daniel, escondiendolo tras el siguiente estante, que era el de Filosofía, y salí de prisa a recibir a mi jefa —. ¿Sigues aquí? Olvidé mi teléfono…
—Sí, es-es que quería estudiar un poco…
—Ah, ya veo. Pero no deberías quedarte hasta tan noche. ¿Vendrá alguien a traerte?
—Yo… llam