Nikolai sale del baño, hastiado de la situación. Busca entre la multitud a Ángela y la encuentra hablando con un grupo de personas. Su vestido elegante tiene un escote profundo en la espalda, que destaca su belleza.
Se acerca a ella sigilosamente y deja un beso suave sobre sus hombros. Ángela se estremece y vuelve a mirar por encima de su hombro, sonriendo.
— ¡Hola! —susurra Nikolai, acariciando su espalda.
Ángela se vuelve hacia él y Nikolai la besa suavemente en los labios. El beso la calma y Nikolai se siente aliviado.
— Lo siento, ha sido una noche difícil —dice Nik, acariciando su rostro.
Nikolai asiente.
— Ya pasó —dice—. Estoy aquí contigo.
Las personas que hablan con Ángela se retiran, y ellos se quedan solos en el salón de eventos.
James y Mariana están en un rincón, hablando en voz baja. El escritor está firmando autógrafos y hablando con los periodistas, sonriendo.
— ¿Estás bien? —pregunta Ángela, mirando a Nikolai con preocupación.
— Sí, estoy bien —responde Nikolai—. Solo