Mundo ficciónIniciar sesiónMi nombre tallado en piedra de mil años de antigüedad. Las letras brillaban como si hubieran sido grabadas ayer, pulsando con luz que no debería existir.
SERAPHINE BLACKTHORNE.
No podía respirar. No podía pensar. Solo podía mirar esas letras y sentir como si el mundo se inclinara debajo de mis pies.
—Necesitamos entender esto— dijo Lydia, su voz temblando—. Necesitamos ver qué más hay aquí.
Levantó su antorcha más alto, iluminando las paredes de la cámara. Y entonces todos lo vimos.
Murales. Docenas de ellos, tallados en piedra negra que cubría cada superficie. No pintados—los símbolo







