La propuesta a Raquel.
-Raque, necesitamos hablar contigo, dijo Emma seriamente, Raquel podía ser su amiga, pero cuando de trabajo se trataba, ella era bastante profesional para separar ambos sentimientos, amistad y laboral.
-Sí, díganme, en que puedo servirles, dijo Raquel un poco nerviosa.
-Raque, Iván y yo hemos estado hablando un poco y hemos decidido que te despediremos de tu puesto.
-Qué, Emma, que he hecho mal, díganme y les juro que lo solucionaré, dijo ella pensando en sus padres y que los había enviado de vacaciones ateniéndose al buen salario que estaba ganando.
Emma se levantó de su silla y la abrazó fuertemente.
-Tontita, no te estamos despidiendo, dijo Emma riendo, tú eres una mala amiga, porque no me contaste que eras una excelente administradora de empresas, tuve que darme cuenta por terceros, dijo mirando a Iván con un rostro gracioso.
Iván levantó sus hombros en señal de ser inocente, haciéndolas reír.
-Es que yo solamente soy tu secretaria Em, no era necesario decírtelo, además sé que si