En el aeropuerto Clara y Raquel despedían a su amiga quien se marchaba por un tiempo indefinido hacía España.
-Chicas prométanme que nunca le dirán a Noah en donde estoy y mucho menos que estoy esperando un hijo suyo, por favor chicas, confío en ustedes, no me fallen, mi bebé y yo se los agradecemos, dijo Emma sonriendo y tocando su vientre.
-Por supuesto que no, puedes confiar en nosotras, dijeron las dos al mismo tiempo.
La chica tomó su bolso y se marchó al hangar en donde jet privado la esperaba.
Después de un largo vuelo, Emma arribaba a España con un poco de sueño.
Esperándola en el hangar estaba un auto de lujo esperándola, las cosas iban bien en la empresa así que Emma tendría solamente que ir algunos días, el resto del tiempo podría dedicarse a cuidar de su embarazo.
Noah llegó a su mansión, con un rostro bastante indescriptible, Kira en la sala, sentada en el sofá, con un maquillaje que la hacía ver bastante demacrada.
Noah entró y la miró en el sofá, subió a su habitación sin siquiera mirarla, llamó a su abogado desde su habitación y lo citó con un divorcio, con las clausulas que a él le parecieron justas, cada uno conservaba lo que trajo al matrimonio.
Kira pensó que todo estaba bien, cuando Noah bajó hacia su estudio, Kira actuando a la perfección, caminó fingiendo mucho dolor hasta donde estaba Noah en su estudio.
-¿Noah, donde está mi hijo? preguntó ella con una vos bastante fuerte, haciendo el papel de enojada.
-Tu hijo, tu hijo está por ahí, tú no te preocupes Kira, sinceramente estoy un poco ocupado, dame un momento y hablaremos, dijo él.
-¿Tu hijo está por ahí? De qué diablos hablas Noah Connor, donde está nuestro hijo, dime de una vez por todas.
-Nuestro hijo Kira, nuestro hijo está tirado en alguna parte hace algunos meses.
Dime Kira hasta cuando querías engañarme, hasta cuando me verías la cara de imbécil gritó Noah haciendo a la mujer temblar de terror.
-¿De qué hablas Noah, no te entiendo?
-De que hablo, mira esto, dijo Noah tirando los estudios hechos por Hernán sobre el escritorio en donde ella fingía dolor.
Kira tomando los papeles lanzados por Noah sintió como su cuerpo temblaba, ella sabía que Noah era implacable cuando se lo proponía.
-¿Ahora dime Kira, porque la prensa tiene información de nuestro hijo como si él estuviese con vida, sabiendo que meses atrás él murió?
-Noah, Noah, perdóname, decía Kira con las lagrimas en sus ojos.
-A mi no me vengas con estupideces Kira, te juro por lo más sagrado que tú me la pagarás en donde más te duele.
-Noah Connor, que diablos le haces a tu esposa, gritó una mujer entrando al estudio.
-Que hace esta mujer en mi casa, volvió a gritar Noah, o sacas a esta mujer de mi casa ahora mismo o simplemente la policía vendrá tras de ti Kira.
-De inmediato Kira dijo a Rubí la madre de Noah que saliera de la mansión.
-Noah, por favor, es tu madre, no la trates de esa manera.
En ese momento llegó el abogado con los documentos, se los dio a Kira de inmediato; firma aquí Kira.
Ella intentó poner un poco de resistencia, pero Noah con un “firma ahora mismo”, hizo que la chica firmara sin más.
-Te juro Kira que jamás imaginé que fueras una desgraciada como me lo has demostrado, no te meto en la cárcel por la amistad que pensé teníamos, de verdad no entiendo que ha pasado contigo, aléjate de esa mujer dijo Noah refiriéndose a su madre, esto no se quedará así, te juro que habrás deseado no meterte conmigo Kira, te haré desaparecer eso te dolerá más que ir a la prisión, no sabes con quien te has metido.
-Lárgate de mi casa ahora mismo Kira, lárgate de aquí.
Kira de inmediato se puso en pie saliendo del estudio de Noah, bastante asustada.
Al salir en la sala estaba Dora, quien había estado quedándose en uno de los apartamentos de Noah, ya que no soportaba a Kira, era una mujer fría y bastante mal educada.
El doctor Raven estaba siendo detenido por los policías él la culpaba a ella de todo lo que le estaba sucediendo.
-Cállese doctor, dijo Kira bastante molesta.
La mujer subió a su lujosa camioneta y se marchó de la mansión la mujer aun temblaba, ella sabía que no habría manera de que Noah no le hiciera la vida un infierno.
En la mansión de Kira estaba Rubí bastante molesta.
-Me vas a decir que te vas a dejar amedrentar por ese mocoso, pues si es así déjame decirte que estás loca, no te puedes dejar y si él está enamorado de esa mujer Emma Wrigth, entonces será a ella a quien atacaremos Kira, aprende a ser una mujer de verdad.
-Rubí, eres increíble, no se me había ocurrido, pues claro, si esa mujer es la culpable de absolutamente todo lo que me ha sucedido en la vida.
-Bien, bien Kira, así se habla, dijo Rubí.
En la mansión de Noah, este intentaba comunicarse con Emma, pero esta había ya quitado su chip del teléfono móvil y había puesto uno que la empresa le había proporcionado en España.
-Señorita Stuart, disculpe que la llame a estas horas de la noche, pero por favor necesito comunicarme con Emma, es muy importante.
-Hola señor Connor, Emma se fue del país, ella aceptó un trabajo, no nos dijo donde, solo que se comunicaría con nosotros después.
-Por favor Clara, necesito comunicarme con ella de verdad que es urgente, te juro que nuestra vida cambiará radicalmente si hablo con ella.
-Lo siento Señor Connor, pero de verdad no sé donde comunicarme con ella.
En el momento en que Clara colgó la llamada, habló con Raquel para contarle lo que había sucedido.
Noah de inmediato llamó a Raquel haciéndole la misma pregunta, pero ella le dio exactamente la misma respuesta.
De verdad Raquel, si no fuera importante no las molestaría, prométeme que cuando tengas alguna información me dirás, necesito que me perdone he sido un completo imbécil.