Pero enseguida fue retenida brutalmente de rodillas en el suelo por las dos mujeres.
— Que mierd4, pensé que tendría más valor - miró la prenda con desprecio, sin embargo, al ver la desesperación de la chica, una idea surgió en su mente.
— Así que esta baratija en muy importante para ti. «Para C. de mamá»
Leyó la inscripción en la medallita.
— ¿Chicas, creen que esta porquería valdría 3000 euros?
— Si te dan 10 sería demasiado…
— ¿Verdad? Pero parece que para la nuerita es muy importante, ¿y si la tiro al río de la ciudad?
— ¡No te atrevas, dámela, te juro que sí que si le haces algo te voy a…!
¡PAF!
Una fuerte bofetada cayó en la cara de Carlotta y luego un aliento vicioso, con un tufo fuerte a cigarrillos, le dio de frente en el rostro.
— A mí no me estés amenazando. Te doy 2 horas para llevarme el dinero al casino Royal o adiós a la cadena de mamita
La agarró con fuerza de la barbilla y Carlotta la miró con odio infinito.
— ¿Sabes qué? No me gusta para nada la miradita en tu cara