GABRIEL
Apenas salvamos el exámen
—Nombre, que suerte, nomas nomas llegamos—decía Fer—, pero ahora tenemos exámen de Martha y Zamarripa mañana y seguidos.
—¿Te dijo la jefa si debíamos regresar?
Consultó la hora.
—Ah, si, ni modo a chambearle.
—Déjame entregar esta carpeta con las secretarias, te acanzo en la entrada.
—Pero muévete.
Algunos me miraban porque traía la nariz roja y un poco de sangre seca, además de que había escurrido en mi uniforme, otros estaban en su mundo, estresados como siempre. Fui a entregar mi carpeta, debía meter mi documentación cuanto antes para que me validaran mis próximas prácticas.
—Hay, Gaby, eres tú—taconeó la secretaria, se llama Mago, o bueno, muchos así le dicen. Pero es una señora que le tira la onda a los chicos.
Es un rumor entre la escuela, pero dicen que se ha tirado a muchos, por eso luce tan fresca.
—Estuvo bien que vinieras antes—apretó la carpeta con su pecho ajustado—, muchos están dejándolo pasar hasta el último día, pero para ti aun hay