Zayn veía como Afrodita conducía aún muy molesta. No parecía tan alterada como minutos atrás, pero aún tenía esa mirada que bien conocía.

-¿Era tu novio?- Detuvo la marcha del vehículo abruptamente al llegar a dónde sería Tentaciones Tres

-No es algo que a ti te importe. Soy la arquitecta y tú algo así como un jefe insoportable- La miró con una sonrisa

-Tu eres una arquitecta, luchadora y además alguien emocionalmente débil- Bajó del vehículo y se dirigió a la puerta del club

-No te pregunté que piensas de mi. Guarda tus opiniones para ti mismo- Advirtió y lo siguió adentro

-¿Dónde pondrías tu el cuarto principal?- Aquello no lo comprendía y eso Zayn lo notó- El mejor cuarto donde lo ubicarías

-No lo sé, de eso debería de encargarse Audrey. Te recuerdo que solo soy la arquitecta aquí- No dió su opinión porque no podía

-Tienes razón. Yo lo situaría aquí o allí- Señaló la primera habitación y también la última. En cualquiera de esos sitios tendría uso, aunque solo una ubicación tiene grandes beneficios

-Las habitaciones tienen el mismo tamaño, si las comparamos unas con otras. Un cuarto principal en un proyecto, es el que tiene mayor tamaño- Explicó

-Si vengo aquí y no quiero esperar entraría al primer cuarto disponible. Si tengo tiempo y aún intento convencer a mi acompañante tomaría el último. Aunque también escogería ese porque debido a la urgencia de quienes vienen aquí, ese sería el que estaría libre- Afrodita lo miró con asco, no necesitaba esa información

-No me interesa saber lo que harías con un acompañante. Solamente debo llevar a cabo este proyecto y luego dejar que Audrey diseñe lo que necesiten Apolo y tú- Tomó aún más distancia. No le interesaba saber nada sobre su "jefe" en un plano más íntimo

-No eres practicante, se nota. Seguro este sea un tema tabú para ti y no comprendas nada sobre lo que sucede en este tipo de lugares aunque trabajes en ellos- Concluyó Zayn y Afrodita evitó decir más. Conocía los cuartos, sus padres tenían uno y también había ayudado a Audrey. Al menos conocía cada cosa que estaba ubicada allí

-¿Influye en mi trabajo ser o no ser practicante? Te recuerdo que solamente debo diseñar y verificar que todo sea construido tal como está en el plano. Si el sexo es o no un tabú para mí no debería importarte- Dijo con firmeza y Zayn tuvo algunas dudas

-Concéntrate en no desperdiciar mi dinero- Acabó la conversación y Afrodita sonrió. Se sentía ofendida, pero si el disfrutaba molestarla, ella también podría hacerlo

-No es mi culpa si no tienes dinero suficiente. Afortunadamente trabajo, así que ese no es un problema para mi- Zayn se sintió ofendido, pero soportó el comentario

-¿De dónde crees que salió el dinero que invertí aquí y en todos los accesorios que serán usados? Nos veremos muy seguido porque trabajaré en el mismo club que tú- Afrodita puso sus ojos en blanco

-Gracias a Dios no te veré porque mi desempeño es diferente al que será el tuyo. Además no asisto en las noches- Zayn asintió. Afrodita le generaba muchas intrigas, pero era mejor mantener la distancia de alguien como ella

Ella se dirigió a la puerta dispuesta a irse después de que Zayn viera cada lugar.

-Tienes que llevarme- Le dijo adivinando su intención de irse

-Iré en dirección opuesta al club. No quiero desperdiciar más tiempo contigo- Apresuró sus pasos y llegó al vehículo, subió y lo puso en marcha observando como él la miraba desde la puerta

Esa fue una pequeña satisfacción obtenida después de tantas críticas e insultos por parte de él. La venganza no siempre tenía que ser mala, había ocasiones donde podía otorgar un buen nivel de satisfacción y eso lo acababa de comprobar.

(..….)

Zayn llegó caminando a su apartamento súper cansado. Él había tenido que pedirle indicaciones a los transeúntes para poder encontrar el camino de regreso después de que Afrodita lo dejara en un lugar tan alejado.

Él recordaba lo que había escuchado de la breve conversación entre la arquitecta y su novio. Se había perdido una pequeña parte de la historia cuando habló con Apolo, ¿Que habría pasado entre ellos?

Por otra parte, él recordaba en el asco que demostraba Afrodita al mencionar las habitaciones de placer. Comprendía que no era practicante, pero le parecía extraño que ella no demostrara interés. Conociendo a Salvador como lo conocía y sabiendo que a él ese tipo de cuartos le gustaban demasiado, así como también que su mujer es su amiga, Afrodita tenía que conocer lo que allí sucedía.

Cuando sonó el timbre, él salió de sus pensamientos al ver de pie a Zayra. Ella se veía muy sexy como siempre. Una porción de sus senos estaba expuesta con el corsé que estaba usando y la pequeña falta enseñaba sus piernas y parte de sus glúteos. Su cabello había cambiado, ya que lo había teñido de negro y además tenía una gran cantidad de mechones en color rojo. Su look era una mezcla entre salvaje, sexy y vulgar, pero para Zayn era perfecto.

-Me extrañaste- Dijo sin dudas arrastrándola al interior de su apartamento

-Mucho- Confesó y lo besó con deseo

*

Para Afrodita la situación con Christian no hacía más que volverse incómoda y estresante. Sentía miedo de contactarlo y que él quisiera terminar con ella. ¿Por qué las relaciones tenían que ser tan difíciles?

Los días transcurrieron sin que los dos tuviesen comunicación.

Christian había pensado en frío todo lo ocurrido y cuando estuvo más calmado algunos días después, decidió ir a Tentaciones Dos para llevarle flores. La había buscado en su oficina pero al no verla allí imaginó que estaría en el club desempeñando su labor de secretaria.

Al llegar a Tentaciones, entró sin problemas. Ya todos lo conocían allí por ser el novio de Afrodita. Caminó distraído mirando la decoración extraña intentando adivinar cuál era la temática de la noche y chocó con una mujer. Ella usaba un perfume cítrico muy penetrante, pero su apariencia y forma de vestir llamaba aún más la atención.

-Hola guapo, ¿Quién eres?- Preguntó dándole dos besos en las mejillas con total confianza

-Hola, Christian Rosco, un placer, ¿Señorita?- Preguntó con total educación

-¿Señorita?- Rió levemente- Dime Zai guapo. ¿Viniste para...?- Interrogó sin minimizar su sonrisa

-Vine a ver a mi novia. Ella está aquí- Dijo sintiéndose intimidado por la personalidad de esa mujer

-Mmm ya veo. Espero verte de nuevo- Le guiñó el ojo y se fue moviendo sus caderas