Leah HaslyeLa verdad que tener dieciocho años no es nada fácilCualquier adolescente en su vida pensaría que al tener dieciocho años podría ser libre, que podría hacer lo que le diera la gana sin tener consecuencias ni preocupaciones porque no habría nadie quien le diera hora de llegada a casa, ni quién le dijera que hacerLa verdad es que, la vida de un adulto chiquito no es nada como lo imaginanAunque mi choque con la realidad no fue tan fuerte porque ya sabía como era el mundo, para otros chicos si fue algo fuerte Cómo para mis compañeros de trabajo en el MacdonaldSi, estaba trabajando en un Macdonald, luego de lo que sucedió con Ciara y el idiota que no dejaba de golpearla. Cuando ella me echara de casa ni siquiera sabía que hacer con mi vidaPero siempre tuve a Mauri conmigoMauricio RinaldiMi ángel guardiánLiteralmenteMe había salvado años atrás él y su gente, de una pandilla de chicos que no dejaban de acosarme y que, en un intento de defenderme... Lastime a uno de grave
Ciara HaslyeQuiero morir No, estoy segura que lo voy hacer Cuando desperté luego del desmayo que me dió, me encontré en una camioneta, no tenía ni idea de dónde estaba y aunque intente hacerme la dormida y pensar que los hombres que me secuestraron me dejarían no funcionó Ahora, horas después de eso me encuentro en la sala de una habitación de lo que parece una mansión en algún lugar Estoy sentada en el sofá fe una habitación, no me he movido de aquí y no puedo dejar de ver hacia todas partes Mi cabeza me recuerda lo que pedí antes de desmayarme y la ansiedad me ataca ¿Donde estarán las niñas?¿Estarán bien?.¿Y si le hicieron algo a Bella?.¿Y si lastimaron a Leah?Me muerdo las uñas y de la nada la puerta de la habitación se abre y por esta entra el que hace tiempo fue mi jefe junto a su hermano.Les veo con mis ojos entrecerrados y Dominici deja en la mesita frente a mi una taza humeante, le veo desconfiada y su hermano idiota se coloca detrás del sofá —Es un té, va ayudart
Ciara HaslyeMi vida de la nada dió un giro drástico.Ya no tenía trabajo.Y estaba secuestrada en una casa gigante por dos hombres y uno de ellos parecia odiarme.Draben era un idiota, las veces en las que nos veíamos siempre peleabamos y siempre era por su culpa, el muy malnacido se había esforzado en hacerme la vida imposible.En cambio su hermano, parecía ser un caballero, me negaba a aceptar lo que estaba sintiendo porque ¡Me secuestro! No solo a mi sino que también a mis hermanas.¡Nos secuestraron a las tres!Ese tema me alertaba más que el que era un mafioso despiadado que mataba gente a gusto y complacia.Aunque me costaba creerlo pues, cada segundo conmigo y mis hermanas era un hombre atento, cariñoso y conmigo un coqueto inato que cada que podía me encendía las mejillas.No podía sentir lo que sea que sentía por él, me negaba a eso.Pero a veces mi cuerpo reaccinaba por si solo y me estremecía, mi cabeza empezó a jugar con mi mente trayendo cada noche sueños húmedos dónde é
Ciara HasleyHabía pasado una semana.Salía de mi habitación solamente para lo necesario, comer y asegurarme que las niñas estuvieran bien.Dominick muchas veces intento acercarse, Pero no se lo permitoEn estos momentos no quiero tenerlo cerca.Si bien mientras estuve en mi relación con... A quel hombre, me deje influenciar mucho por todo lo que decía, de alguna forma logro jugar con mi mente para haceme creer que sin el yo no era nadie.Solamente necesitaba del cariño de alguien, Pero elegi a la persona incorrecta y me arrepiento mucho de eso.Arruinó mi vida, pero tengo que admitir que también fue mi culpa, tuve varias oportunidades para dejarlo pero por alguna razón siempre me negaba.Tal vez era porque sentía que me merecía todo lo que el hacía, me lo merecía todo.Paso mis manos por mi cabello quitándome el exceso de agua, salgo de la ducha para verme frente al espejo un rato antes de notar las ojeras bajo mis ojos cafés.«Estas horrible, Ciara»Ni siquiera tengo energía para i
Leah Hasley—¡Mírame Leah!—Bella mueve sus brazos antes de lanzarse a la piscina.Aplaudo mientras veo como los flotadores la mantiene en la superficie, frunce en rostro empezando a mover sus brazos intentando nadar.«Pero no lo logra»Aunque las ganas de reír son muchas, me las trago y le chiflo al igual que grito animandola.—¡Fantástico, Bella!—Ella sigue intentando nadar y me río.Miro hacia la puerta borrando mi sonrisa, miro la inmensa mansión y me preguntó si Ciara está bien.Hace mucho que no la vemos, he pensado en ir a verla a su habitación pero cada vez que estoy fuera de ella me preguntó si tal vez yo soy la causante de su molestia.Tal vez el saber el otro lado de mi vida.. le molesta de algún modo, se siente decepcionada de mi.Aunque ella se sienta así, no me arrepiento de lo que hice ni de lo que aprendí.«Hice lo que necesitaba para sobrevivir».Es lo que he hecho desde mi nacimiento.Sobrevivir.Me recuesto de la silla, cruzandome de brazos. Mis ojos se centran en Be
Ciara Haslye Siento el corazón en la garganta. Suelto un suspiro, mientras permito que el frío del aire acondicionado me abrace, la alarma de mi celular suena desde la mesera avisándome que son las seis de la mañana«Es hora de despertar a las niñas»Veo unos minutos más por la ventana,antes de darme la vuelta y correr hacia las escaleras, trotó por el pequeño pasillo antes de abrir la puerta de puerta de Bella. La pequeña de nueve pronto diez años duerme como princesa abrazada al peluche que ganó hace un año en la feria—Buenos días princesita—Murmuro alejándoles las hebras negras de la frente —Es hora de despertar—Dice algo inaudible dando la vuelta haciéndome reír —Llegarás tarde al colegio....—Mimir más..—Murmura —Sueño...—Rio montandome en la cama para acercame a ella y empezar a llenarle el rostro de besos—Hmm.. Ciara...—Ahora si pequeña—Beso su nariz. Empieza a restregarse los ojos y aparto sus puñoz para que no se haga daño—¿Estas lista para este gran día?—Sus ojos azules
Aliso la camisa antes de sonreírme a mi misma frente al espejo.Lo haré increíbleLlevo una semana en la empresa, es lunes inicio de semana. Hoy toca ir temprano como siempreSalgo de mi habitación dirigiéndome hacia la cocina donde reviso haber dejado todo preparado para las niñas, al asegurarme voy a sus habitaciones y salgo de casa enviando un mensaje que seguramente Leah vea en unas horasEntro al auto dirigiéndome a la empresa, el frío me pone sensible la nariz y suelto algunos estornudos.No tardo en llegar y como lo eh echo esta semana; entro muestro, mi pase y saludo a todos de manera amable.El ascensor me lleva al último piso donde se encuentra la oficina de mi jefe. Salgo dirigiéndome hacia mi respectivo puesto, enciendo el ordenador y coloco mi bolso aún lado sacando el envase y el termo de café.Me pongo de pie entrando a su oficina, el lugar es inmenso y huele a él. Aspiro cerrando los ojos dejándome embriagar con ese delicioso aroma a robleAún no puedo creer todo lo qu
Dominick Müller La mañana comienza como todos los días, me estiro en mi cama antes de pasarme las manos por el rostroMe levanto acercándome al baño para tomar mi ducha matutina, me cepillo los dientes y voy hacia mi closet, colocándome uno de mis trajesNo tardo ni un segundo, me coloco el reloj y salgo de mi habitación dirigiéndome hacia la salidaLa casa está en completo silencio, el color gris se encuentra en todas partes, al igual que La PazAlgo que disfruto demasiado—Buenos días señor Müller—Buenos día Bruno —Hace un asentimiento y me adentro al auto negro. Saco mi celular sonriendo al ver como mi castaña asistente entrar a mi oficina y acomoda todo en mi mesa para luego ver el lugar con una sonrisaMe acomodo cerrando los ojos pensando en el delicioso aroma del café y el maravilloso sabor del pastelSuspiro recordando la figura de su cuerpo y lo bien que se ve con ese bendito vestido que le marca absolutamente todo el cuerpo—Hemos llegado señor—Bajo del auto acomodando mi