Izan

El paseo en la noria estuvo mejor que el tiovivo.Era bastante alta y desde arriba tenía unas vistas preciosas de casi toda la ciudad.

A Yelena también le gustó.Aunque no lo dijera sus ojos se abrían asombrados cada vez que llegábamos a lo más alto y los dos acabamos riendo por las ocurrencias de nuestro hijo.

Después de eso vinieron una serie de interminables viajes en múltiples atracciones.No sabía que un niño podía tener tanta vitalidad.Por supuesto me tocó acompañar a Zack en la mayoría porque, según palabras textuales de Yelena "La idea de ir al parque de atracciones había sido mía".

Afortunadamente al pequeño le entró hambre y fuimos a comer algo en uno de los múltiples restaurantes que había en el recinto.

Por la tarde seguimos disfrutando de las atracciones y al bajar de una Zack vio algo que le llamó la atención.

—Quiero el peluche del gato.Será el mejor amigo de Zeus.

—¿Zeus? —preguntó confundida la castaña.

—Zeus, mi lobo de peluche, mami.Tío Izan me sugi