Lucas nunca volvió a casa, pero sí me envió un enlace telepático preguntando qué estaba haciendo. Sin Lucas ni Marge aquí, significa que tenemos la casa para nosotras solas. Pasamos la mayor parte de la noche viendo películas, y Ryden me ayuda a ponerme al día con la montaña de tareas que perdí la semana pasada.

—Las tareas deberían estar prohibidas —murmuro, mirando la tarea de inglés que nos dio el Sr. Nagi. Juro que me dio más solo para vengarse de Lucas por avergonzarlo.

—Deja de quejarte y hazla. Quieres volver a la escuela. Y la escuela significa tareas.

—Fácil decirlo para ti. Tú no eres la que tiene que hacerlas —me quejo y lo fulmino con la mirada. Además, él es el Alfa. Seguro que no tuvo que lidiar con toneladas de tareas en primer lugar.

—¿Para cuándo es la entrega? —pregunta, sin importarle la mirada asesina que le lanzo.

—No hasta el final de la semana, excepto esta maldita tarea. El Sr. Nagi quiere vengarse de mí. La quiere para mañana.

—Bueno, ya es tarde. Siempre pued