Capítulo 52: Finalmente me voy.
Tristan colgó la llamada de su padre con un "Tip" y dejó el teléfono sobre la cama por unos segundos, su mandíbula permaneció tensa y los nudillos de sus manos hechas puños, se volvieron blancos por unos instantes.
Un silencio breve se apoderó de la habitación antes de que él respirara hondo,
—Bien… —murmuró para sí, con un tono frío—. Vamos a terminar con esto.
Volvió a tomar su teléfono móvil, sus dedos se movieron con rapidez sobre la pantalla, deslizando contactos y marcando números.
Bip… Bip...
—Quiero que empieces a buscar a Chantal —ordenó en cuanto escuchó la voz de su hombre de confianza—. Dónde está, con quién habla, qué hace… todo. Y no quiero excusas, la información tiene que estar en mis manos antes de que termine la semana.
Se levantó, caminó hacia la ventana, observó la ciudad parisina bajo el cielo de la tarde.
—Sí… ya sé que dicen que está ocupada o molesta —interrumpió, impaciente—, pero no me importa. Lo que quiero es saber si alguien la tocó, si alguien