Los de seguridad se llevaron a Marcus sin dudarlo, por
órdenes del señor Rivera fue que llamaron una ambulancia para el tipo
moribundo. Lauren se despertó al sentir que le estaban sacando los pedazos de
cristal pero a pesar de que el dolor era grande se mantuvo quieta.
— Ya estás lista — Sebastián
envolvió los brazos con vendas — te llevaré a un hospital así que vamos, papá
por favor ven con nosotros.
— No es necesario que me lleven al
hospital — ella habló débilmente — solamente llamen un uber y yo puedo ir sola.
— Papá por favor ven con nosotros,
tú irás detrás con ella en lo que manejo — Sebastián ignoró por completo a
Lauren — vamos de una vez.
— Repito que no es necesario que me
lleven al hospital — Lauren se sentó en el sofá — puedo ir en un taxi o un uber
sin problemas, ya suficientes molestias di.
En el momento que Lauren intentó levantarse por poco se cae
de no ser por Sebastián, él la miró completamente furioso y la sentó en el
sofá.
— ¡POR UN DEMONIO DEJA DE SER TAN
OBSTINA