Capítulo 129

—Por favor, total discreción —pidió Sofía a su amiga y colega.

—Tranquila, Sofía. Nadie lo sabrá.

—Gracias —se acomodó en la cama de la habitación de hospital con su bebé en brazos—. Ahora sí, hazlo pasar.

—De acuerdo.

La doctora caminó hacia la puerta y llamó a William, quien entró con una gran sonrisa y un ramo de flores en las manos.

—¡Cariño! —gimió, acercándose con las flores para abrazarla.

—Por favor, William, aparta eso que puede darle alergia al bebé —pidió con un gesto de mano.

—Oh, sí, claro —las acomodo en un jarrón—. Lo siento, las vi en la cafetería y sentí que debía comprarlas.

—Te lo agradezco.

—Siento tanto no haberte acompañado en el parto, cariño —se acercó y la abrazó.

—Era un parto delicado, así que era normal que la doctora te pidiera esperar a fuera. Tranquilo —lo reconfortó, sabiendo que aquello era algo que ella había solicitado.

—Déjame verlo —hizo referencia al bebé.

—Claro.

Sofía apartó la manta y le permitió a William ver el rostro de su pequeño. Era
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP