—Jazmín.
Julieta pensó que se había comportado de una manera demasiado ingrata con Jasmine, y se culpó por ello.
Durante la cena, Jasmine estaba tratando de ayudarla, y ella la acusó de haber exagerado por el bien de Samuel.
—Lo siento, Jazmín, de verdad que lo siento —Julieta siguió disculpándose.
Jasmine siempre la cuidaba y se preocupaba por ella.
Pero nunca se molestó en conocer el pasado de Jasmine, y la daba por sentada.
Se dio cuenta de que no hacía lo suficiente por Jasmine, ni de lejos.
Jasmine levantó la cabeza y dijo con una voz llorosa:
—Julieta, siento que Samuel no sepa cómo valorarte. No quiero arruinar su relación. Tienes cáncer de pulmón, y yo me engañaba, diciéndome a mí misma que estarías bien. Sin embargo, también sé que...
Jasmine no completó el resto de la frase y continuó diciendo:
—Julieta, me temo que él se arrepienta. Si algún día descubre la verdad y tú ya te hayas ido, quizás no pueda perdonarse a sí mismo.
Julieta extendió la mano para secarle las lágrim