Capítulo 30.
Al llegar a la habitación del Alfa Líder Malcolm, Oleika es arrojada a la cama.
— Pero… — Dijo agitada por el camino.
— No— Respondió Malcolm al mismo tiempo que se arrancaba la camisa y se arrojaba sobre el colchón, al lado de ella.
Malcolm se veía desesperado, y se sentía igual, después de varias horas en constante correr para disminuir el sentimiento de un fuego abrazador consumiendo su interior, nada había funcionado.
Solo Oleika se encontraba en su mente, ella y su habilidad de tranquilizarlo, disminuiría la rabia que amenazaba con consumirlo.
— Oleika, ahora— Volvió a gruñir esta vez provocando que ella se erizara al notar la rabia que impregnaba su voz.
Sin detenerse mas , extendió su mano para tocar solo uno de los dedos de su mano.
— ¿Que haces? — Cuestiona Malcolm al ver la acción de ella.
—Señor, no creo que sea prudente que esté en este lugar, usted ya tiene a su pareja solo a unos cuantos metros de aquí, no puedo tener a la Luna de la manada.
RROOOOAAARRRR
El gruñido dese