CHIARA :
Pasado los días del celo de Asher, despierto con todo el cuerpo adolorido.
Intento moverme, pero Asher me pega más a él.
¿– Dónde piensas ir?
Me susurra con la voz adormilada.
– Sólo... Intento moverme... Me duele todo el cuerpo.
– Mmm, de acuerdo.
Dice sin abrir los ojos y afloja su agarre de mí.
Me giro quedando frente a él.
Observo su perfecto rostro tallado por lo mismo dioses y sin querer de mi boca sale.
– Iván...
Asher de inmediato abre los ojos y frunce el ceño.
¿– Quién rayos es Iván?
Pregunta.
– No es nadie.
Digo mirándo hacía el techo.
– Chiara... No puedes mentirme... Dime ¿Quién es Iván?
Dice con el ceño fruncido y sus ojos casi rojo.
Suspiro y lo miro a los ojos.
– No sé, quién es Iván... Sólo soñé con el y lo llamé Iván ¿Feliz?
– No tienes derecho a soñar con otro hombre que no sea yo.
– Creo que el celo afectó tu cerebro Asher.
Digo levantándome de la cama, pero término sentada por el dolor en mis piernas.
Miro a Asher y está igualito, mejor creo que