Chiara:
Cuando llego al lugar donde se encuentra mi lobo, está siendo atendido por Birk en una pequeña casa de campaña.
¿—Está bien?
Le pregunto a Raphael que se encuentra afuera.
—El alfa es fuerte, no debe de preocuparse.
Me sonríe inclinando la cabeza.
Entro y me encuentro con Birk.
—El alfa ha sido envenenado, pero ya se encuentra fuera de peligro, sólo será cuestión de horas para que despierte.
Asiento y miro como permanece en una camilla indefenso.
—Gracias Birk, siempre estaré agradecida.
Le sonrió con agradecimiento.
—Es mi deber luna… Debo de velar por el bienestar del alfa, de usted y la manada.
Habla con seriedad y asiento.
Birk se iba a marchar, pero se voltea y me dice.
—Usted ha gastado mucha energía, así que le recomiendo que descanse, mientras nosotros nos encargamos de todo.
— Estoy bien Birk, no te preocupes.
Hablo convencida.
—Su embarazo puede estar en peligro si usa mucha energía y no descansa para recuperarlos…Así que por favor luna, tómese un descanso Raphael y