Marcus
Cierro los ojos intentando controlarme. Estos hijos de puta se merecen morir por intentar jugármela. Mi nivel de stress está por las nubes. Intentar mantener viva a mi mujer está siendo toda una odisea.
Abro los ojos y vuelvo a la mesa. Mía me mira preocupada.
- ¿Estás bien?
Necesito que nos vayamos de aquí, alejarla de su familia. Necesito que sepan que sé lo que han intentado hacer y que esto no va a quedar así.
- Ha surgido una emergencia en uno de mis locales, tenemos que irnos.
El padre de Mía mira su plato a medio comer y después a ella, sorprendido porque siga viva.
Mira todo lo que quieras saco de mierda. Pienso elegir yo mismo las flores de tu tumba.
- Pero... - Comienza a protestar mi mujer.
Nos vamos a ir. Puede venir por las buenas o me la puedo llevar a rastras. Me gustaría no tener