La Visita A Lux
El cielo de Lux se extendía amplio y dorado sobre las praderas abiertas, donde los aullidos del clan de Rikhan se entrelazaban con risas infantiles y el rugido distante de entrenamientos en curso. Las tierras del líder Lycan florecían nuevamente, con casas restauradas, campos cultivados y un espíritu renovado tras años de lucha.
La gran torre central de la fortaleza Lycan se alzaba imponente al fondo, pero era el patio abierto, rodeado de estructuras circulares de piedra y madera, donde la familia de Damian y Alessia aparecieron después de abrir un portal.
- Es más verde de lo que recordaba. - murmuró Alessia al caminar con elegancia, su túnica ondeando con el viento cálido.
- Es porque ahora tiene quien le gruña si descuida los jardines. - replicó Damian con una sonrisa torcida, observando a Rikhan aparecer desde el flanco izquierdo, sin armadura, descalzo y con el cabello alborotado como buen alfa que no se disculpa por su aspecto.
A su lado, una mujer de porte seren