Adrián Sokolov
Escucho las indicaciones de los policías mientras Marie tiene su rostro entre sus manos y los codos en sus piernas. No ha dejado de llorar y quisiera abrazarla, pero ni me mira. Carlos a ocupado mi lugar. Estoy lleno de rabia, yo debería estar ahí a su lado. Pero es obvio que Marie no es como esas mujeres, que la hieres y regresan. Marie se respeta y sabe lo que es bueno y lo que es malo. Y yo soy esto último.
Mi celular suena y me alejo un poco de ellos.
-Hey Lenny -digo observando a los policías.
-¿Qué ha pasado con la hija de tu secretaria? -pregunta y me quedo en silencio unos segundos.
-Marie no es mi secretaria, digamos que fue mi amante, aunque creo que siento algo más por ella. La niña aún no aparece -digo mirando mi reloj.
-Te enamoraste, ¿se lo dijiste?
-No qui