Bianca Palmieri es las más grande actriz juvenil del país, hija de un famoso senador. Todo el mundo cree que lleva una envidiable vida, podrían decir casi perfecta que todos desearian tener, pero las vidas perfecta no existen y Bianca debe lidiar con los fantasmas del pasado, dejando sus adicciones atrás y abriendo su corazón que fue herido por un hombre que la llevo a ese mundo de perdición. Gracias a su padre llegara a su vida un hombre que le hará sentir que puede abrir su corazón de nuevo. Pero este se niega a vivir el amor porque para el ella es solo un sujeto que tiene que cuidar... Dante De Luca ex agente de policía debe dejar atrás la culpa y el rencor para poder seguir con su vida a lo que se niega olvidar; hasta que conoce a su nuevo trabajo; la actriz Bianca Palmieri, al verla todo su ser la reclama como suya, no puede dejar de pensar en besar aquella pequeña boca, abrazar ese pequeño cuerpo y protegerla de todos con su vida. Una noche no resistirá más su forzada fortaleza que ha construido para hacer su trabajo perfecto, su sentimiento surgirá con una fuerza y se entregarán los dos al amor, y los consumirá el fuego el deseo. Al final Dante ha roto su regla número uno "No involucrarse con el sujeto" desde ese momento Dante De Luca hará todo por tenerla a su lado y dirá: Es Mía....
Leer másLos días pasaron muy rápido a Sophie le habían dado el alta y ahora estaba en casa de Dante jugando feliz con Angello que al verla corrió feliz a su encuentro, Dante estaba abrazando a Bianca y disfrutando el sonido de las risas de los niños, la mamá de Anabella fue junto a su nieto habían sido tres días sin verlo que tenía planeado en cuanto lo viera le daría los besos que no había recibido estos días, —¿Estas feliz?— Bianca le acarició su mejilla con ternura, el la miro como siempre con amor, —Si, estoy muy feliz— todo había cambiado tanto, ya no era ese hombre que buscaba a las mujeres para satisfacer sus necesidades, no porque ahora estaba completo con Bianca, su otra mitad,— te tengo a ti, ya está aquí mi hija, sabes se parece tanto a mi mamá— Bianca sonrió— está conmigo Angello que haré un hombre de bien, —Te creo— acarició su cabello— mi amor, organice una pequeña reunión para darle la bienvenida a Sophie, no te molesta —Por supuesto que no, así ella va ir conociendo a la
¿Te gusta la pizza?— Bianca estaba en la cocina junto a Ágata mirando al pequeño Angello comer con gusto la rebanada de pizza de pepperoni que él había pedido—Si señorita— dijo con la boca llena, Bianca sonrió al ver al niño comer bien—Dime Bianca Angello— le dijo dulcemente al pequeño que sonrió— toma aquí está una rica agua de naranja— tomo el vaso con gusto y le dio un gran trago— como Angello— dijo al separarse para ver hablar con Ágata, estaba preocupada por la Sophie que había pasado para que llegará al hospital— ha llamado Dante Ágata—No niña Bianca, espero no sea nada grave— eso mismo deseaba Bianca, miro la ropa sucia de Angello, no tenían con que cambiarlo si querían que se diera un buen baño —Hay que limpiar tres habitaciones Ágata— asintió— y hay que comprar algo de ropa para Angello y Sophie…— comenzó a sonar el timbre de la puerta—Ahora regreso niña Bianca— Bianca sonrió porque no podía decirle solamente Bianca, regreso junto a Angello que estaba feliz comiendo—Do
Dante sintió un golpe en la boca del estómago, su hija, la niña que estaba buscando la tenía ahí cerca, en ese hospital pero enferma, ¿Qué podría tener para la llevarán al hospital? ¿Sería grave? Fueron las preguntas que se formulo en la cabeza, sin saber en qué momento comenzó a sentir como las lágrimas rodaban por su rostro, y de pronto sintió la mano de Bianca sobre su hombro, sentirla fue grato para él, porque sintió que estaría a su lado, le agradeció con la un gesto en la cabeza y de nuevo miro a Angello que estaba mirándolos a los dos— ¿Qué tenía tu hermanita?— el niño levantó los hombros en señal que no sabía—No sé, mi abu dijo que tenía mucha fiebre—¿Dónde está ella?— le pregunto tragando el nudo en la garganta, tenía que calmarse, no podía ver el panorama negro—Por ahí— dijo señalando atrás de él— ven te llevo— Dante tomó la mano de Angello que lo llevo por el pasillo por dónde había venido y al final dieron vuelta a la izquierda y siguieron el pasillo hasta que llegaron
Santino había logrado salir del país con su pasaporte falso, con el que había estado saliendo para ir a ver a Bianca que estaba en España, estando ya fuera de Italia, se enteró que su empresa estaba ya en la quiebra, la mayoría de los contratos se habían roto, porque nadie quería trabajar con él, no querían que lo relacionarán con él, también le habían mandado su despido del senado y aparté ya se había interpuesto una denuncia por la muerte de su primera esposa, así que el nombre de Santino Palmieri estaba ya marcado y tendría que parecer que había muerto, cerró el portátil, y antes de salir de la habitación del hotel se miro en el espejo, en cambio de color de cabello le había quedado bien. Sonrió pensando en la casa que visitaría, dónde comenzaría su nuevo negocio, tenía claro que debía manejar un perfil bajo, y sobretodo no saliera su asentó italiano, nadie podía saber dónde podría encontrarlo, y de eso estaba seguro porque casi nadie conocía su otro nombre, daba gracias a su madre
El día había llegado para Santino, el que tanto había esperado, con el que había soñado toda su vida, ser nombrado el candidato oficial del partido social democrático a la presidencia. Después que Sandro dejará que De Luca se la quitará, no sabía nada de él y era mejor, estaba harto de escuchar sus lloriqueos, no había sido lo suficientemente hombre para lograr que Bianca se volviera a enamorar de él, no había logrado estar con ella y hacerle creer que ese engendro que crecía en el vientre de su hija fuera de él y no De Luca, había llamado antes de ir a Lucca y la mujer de servicio le había confirmado que Sandro estaba en casa con una botella en mano y muchas pastillas en la mesa, al escuchar eso Santino estaba convencido que Sandro había vuelto a consumir, el niño no tenía control, pero eso sirvió para sus planes, si no había hablado con su papá lo tenía en sus manos, tendría su apoyo incondicional en las elecciones internas y mientras los demás militantes lo vieran tenía el votó de
Bianca no podía creer lo que escuchaba, ¿siempre había buscado su bien?, Pero cuál era su bien en obligarla a casarse con Bruno, dónde estaba su bien alejarla del único hombre que la amaba, que siempre estaba buscando su bien, que de bien tenía entregarla en las manos de Sandro que había sido el primero en abusar de ella, aunque tenía que reconocer que está vez en España se había comportado bien. Todo lo malo que le había pasado últimamente era su culpa, el abuso de Bruno había sido porque lo tenía amenazado con unas fotografías, y ahora lo dudaba que existiera, porque eran socios en los negocios sucios, si no hubiera estado coludido con ellos tampoco hubiera comenzado con las amenazas que eran a su persona— por eso vengo a pedir que favor no me denuncies— dijo Santino, y para Bianca todo quedó estaba quedando claro comenzó a re
Último capítulo