Después de terminar la clase de la que tanto hui y fue mi ruta de escape con Lucifer, salgo de mi aula de clases y me sorprendo al ver un camino de rosas que me marca un camino poco convencional; la cocina.
‘¿Quién carajos hace un camino de pétalos de rosas hasta la cocina? ¿Acaso es una forma romántica de llevarme a los quehaceres de la casa?’ me pregunto mentalmente.Con una manada tan loca como en la que me encuentro, nada de eso deja de sorprenderme. Así que, negando lentamente camino hacia la cocina donde a diferencia de lo que esperaba, todo está organizado y Lucifer me espera sonriendo al lado de la isla de la cocina, donde hay varias bandejas cubiertas.— ¿Qué es todo esto? — pregunto confundida.— Es un soborno. — responde Lucifer y yo lo observo como si estuviera loco.Después de todo, ¿Por qué debe recurrir a un soborno si