Punto de Vista de Elara Vane

​—Lo resolveré —murmuré, aunque mi pecho se apretaba al pensar en lo imposible que sonaba eso.

​Para mi sorpresa, Kaelen tarareó pensativamente, tamborileando con los dedos en el volante.

​—Bueno, puede que tenga una solución para ti.

​Parpadeé y levanté la cabeza de golpe.

​—¿Qué?

​Me lanzó una sonrisa burlona.

​—A menos que encuentres un mate o un esposo que comparta el mismo sueño que tú, alguien que quiera viajar, dejar la manada y vivir en el mundo humano, entonces tal vez mi hermano le conceda ese deseo a tu esposo. De lo contrario, tus posibilidades de salir de aquí son cero.

​Una vez más, el destino de una mujer necesitaba estar ligado a un hombre.

​No sé cuándo se me escapó, tal vez mi cerebro hizo cortocircuito, o tal vez era solo una idiota. Pero antes de que pudiera detenerme, pregunté:

​—¿Te refieres a un esposo como tú?

​El coche se sacudió ligeramente. El agarre de Kaelen en el volante se tensó, y giró la cabeza tan rápido que pensé que podr