Capítulo 170.
Donovan.
El crío se sube a la silla, antes de acomodarse correctamente. Mientras las empleadas se mueven con rapidez al ver que ya estamos en el comedor. Es la hora habitual del desayuno y por ello no tardan en servirme las tortas de avena apiladas con frutilla. En lo que acomodan el resto de platos.
Me cruzo de brazos primero, observo el plato, luego agarro el tenedor. Kilian hace lo mismo. Corto un pedazo, él también. Me lo meto en la boca… y ahí está, el muy canalla me está imitando hasta cómo mastico.
No digo nada. Me limito a seguir comiendo.
Hasta que pasos apurados me hacen saber que la madre ya sabe que está aquí. Sofía entra como un vendaval con el pelo suelto, la respiración agitada, y esa cara que pone cuando cree que algo le pasó a su cría y que, por supuesto, yo no supe evitar.
—¡Mi amor! —casi grita, agachándose frente a Kilian y tomándole la cara como si se le fuera a evaporar en cualquier momento—. ¿Estás bien? ¿Te pasó algo? ¡¿Estás herido?!
Lo besa. Una vez. Dos. T