Capítulo cincuenta y cuatro; Lobo feroz.
—Mis padres quedaron encantados contigo.
—También yo con ellos. Son unos padres muy hermosos Alexey. Ahora veo de dónde es que vienes. Tu escencia y todo lo que eres es igual de bonito a lo que son tus padres.
—Tú eres la persona con la escencia más bonita que conocí en toda mi vida.
—¿Hablabas en serio cuando dijiste que querías irte a viajar por el mundo?
—Hablaba muy en serio.
—Siempre quise tener una casa rodante. –confieso y río por qué siempre me imaginé viviendo en una.
—Conozco a alguien que tiene muchas de esas. Mañana mismo iremos a buscar una, ¿te gusta la idea?
—Me encantaría.
Alexey me abraza a su cuerpo y yo descanso mi cabeza en su pecho, aspiro su aroma y me río del rumbo que toman mis pensamientos.
—¿Qué es tan gracioso?
—Tu aroma me excita. –confieso y lo siento reír sobre mi frente.
—¿Aunque no me haya bañado?
—No hueles mal. Tu aroma es...delicado y me gusta, pero no es tu perfume solamente, es una mezcla de todo tú junto.
—No quería sonar muy raro per