Mundo de ficçãoIniciar sessãoAntonela miraba a través del cristal empañado de la vieja fábrica, cuando vio llegar a Fabricio con Alessia. Minutos antes, estaba sumergida en sus recuerdos de horas atrás, cuando Benjamín la besó y le confesó que deseaba tenerla cerca.
No podía dejar de pensar en lo que había sucedido. El sabor de su beso aún estaba en su boca. Su olor, impregnado en ella, hacía que no pudiera dejar de pensar en él ni por un segundo.
Si antes el amor ya era visible, ahora era imposible evitar sentir algo más por él.
Pero la escena que siguió hizo que sus pensamientos se disiparan y se concentrara en un solo hecho: ¿Qué estaría haciendo Alessia en la fábrica?
Salió de la habitación rápidamente, sabiendo que era un error reencontrarse con Alessia horas después de haberse enfrentado a ella. Su cabeza todavía







