Cap. 11 El intruso y los sueños premonitorios
Rowena analizaba la hierba y comentó.
—Es hierba lobo, una hierba que espanta a los tuyos.
Entonces ella siguió la ruta que el sujeto había seguido y Dash fue junto a ella.
—Yo lo vi salir de la casa, alguien sabe cómo engañarlos.
Pudo tomar cualquier camino, así que rastrearlo sería complicado. Fue ese momento en que Boris salió y el animalito fue a su encuentro y este lo acarició.
—Dash, reporte de la noche.
Dash gruñó como si quisiera decirle alguna cosa.
—¡Qué olor es ese!
Rowena le mostró la planta.
—Es espanta lobo.
—¡Quite eso, por el amor de Dios!
Ella lo tiró lejos y le comentó.
—¿Qué hace con eso, Rowena?
—No es mío, es... Parece que alguien lo usó para despistarlos.
—¿Despistarnos?
—Dash estuvo inquieto toda la noche, parece que lo sintió, un extraño entró en la casa.
Eso tensó a Boris que le dijo.
—Eso es muy serio.
—Anoche vi salir a un hombre de la casa, parecía huir. No sé, creo que alguien entró y robó, o que sé yo…
—Lo que me dice me preocupa, vamos a la casa —le dijo