Condujeron hasta el hospital.

La secretaria era la única que esperaba fuera del quirófano.

Las condiciones de este hospital aquí eran sencillas.

Alfredo tenía las cejas fruncidas desde que entró.

Iris intervino, "Felipe, ¿cómo le han enviado a un hospital como éste?"

"¿¿Por qué estás aquí??" La secretaria se sorprendió de que Alfredo apareciera.

Alfredo dijo, "Me ha llamado Rodrigo."

La secretaria bajó los ojos, "Así es."

Iris miró fijamente a la secretaria, "¿Parece sorprendida?"

La secretaria ladeó la cabeza, con la expresión oficial habitual en su rostro, un poco condescendiente, un poco seria, se colocó en una posición en la que miraba a los demás por encima, "Lo ha entendido todo mal, esta señorita."

Tuvo el capital para despreciar a los demás como secretaria de Rodrigo.

Cuánta gente que quiso ver a Rodrigo tuvo que pasar por ella.

Iris era una señora de una familia rica, no tenía miedo a la secretaria, "Alfredo y Rodrigo son amigos, yo soy la mujer de Alfredo, debes ser respetuos