Bolton.

Después de ese sueño no me pude dormir más, Conor estaba impaciente y quería que fuera por ella, Pero ¿a dónde?.

Desde que hace muchísimos años perdimos a nuestra luna nunca más volvimos a sentir ese vínculo. Fue durísimo y sentimos que casi morimos juntos con ella, mi hermosa Sahara, tarde años en superar su ausencia y nunca fui el mismo. Todo por los antepasados de Bluemoon, los caze y acabe con ellos.

Solo pensar en eso me hierve la sangre y saber que debo ir a meditar una tregua entre Bluemoon y Starwolf me irrita, si fuera por mi arrazaria con esa manada, Pero para ser honestos las personas que mataron a mi Sahara ya pagaron. Odio su sangre aunque no tengo derecho a lastimarlos, y es por eso que me consideran justo y correcto para ser su alfa supremo.

Cuando llega el amanecer me levanto y voy al baño para asearme y bajar para desayunar, como siempre cuando llego a la cocina ya está Carson esperando para que desayunemos juntos.

-Esta todo listo- digo sin saludar.

-Hola a vos también - dice riendo - no te ayudo a sacar el mal genio Nerea.

-Solo me alteró peor- digo.

-Eso es porque le das un lugar que no le corresponde hermanito - dice Tania entrando a la cocina y Carson se tensa.

-¿Y cuál sería ese?- cuestionó.

-Dejarle andar por esta casa como si fuera suya -dice enojada - si te la querés coger hacelo en otro sitio no en tu habitación, dónde le haces creer que tiene derecho sobre vos.

-Tiene su punto la enana- dice Carson y ella lo fulmina con la mirada.

-Mil veces le dije cuál es su lugar.

-Amigo cuando una mujer pone sus ojos en uno por más que le digas que no la querés va a hacer lo imposible para tenerte. Y sabes los antecedentes de Nerea, nunca debiste dejarla entrar.

-No hablemos más de esto, me van a hacer enojar peor.

-Claro no vaya a ser que por nuestra culpa no tenga donde mojar su verga.

-Tania la boca - digo.

-Verga, pito, pene , concha, vagina- dice Tania- hermano ya no soy una niña hace muchos años que hago lo mismo que vos. Sabes que las mujeres tenemos derecho a coger y hasta que aparezca mi mate no voy a quedarme celibe.

-Por dios Carson sácame esa imagen de la cabeza- ruego - hablemos de la conciliación.

-Peor sería una imagen mía con tu amigo entre mis piernas- dice tomando un pan de la mesa y guiñandome un ojo y sale moviendo sus caderas.

-Juro que la mato- digo y Carson se ríe.

-Bien centremonos en el trabajo, la reunión es en tres días. Conseguí un punto neutro- afirma- Pero no te va a gustar.

-No me des largas, ¿dónde?

-El bosque maldito -dice.

-No me jodas, ahí no -digo casi gritando.

-Se que te trae malos recuerdos, pero solo en ese lugar accedió Dorian a vernos.

-Quiere desestabilizarme-afirmo- sabe que me duele ese lugar y quiere ponerme débil.

-Bol, pasaron más de 40 años desde que murio Sahara. No dejes que Dorian juegue con tu cabeza.

-No te preocupes quiere jugar, vamos a jugar. Solo acceso porque se que Starwolf no busco está guerra.

Salgo de la cocina y me voy a mi oficina, mi amigo sabe que debe darme espacio. Si bien me recupere de su muerte cada vez que me la mencionan algo se remueve en mi interior.

Ese día me la paso trabajando y por la tarde voy al campo de entrenamiento donde me desquitó con mis pobres guerreros, soy implacable y en un momento Chaz mi jefe de los guerreros me pide que los dejé tranquilos. Y ahí me doy cuenta de que varios están lastimados, la realidad es que en unas horas van a sanar gracias a nuestra sangre lo lobuna, pero ahora se retuercen de dolor.

Por suerte gracias al entrenamiento por la noche caigo rendido en mi cama y no necesito a ninguna hembra para descargar energía.

Me sobresalto en la cama y estoy completamente sudado.

Cierro los ojos y vuelvo a ver el sueño.

Ella está en el bosque caminando descalza, su cabello blanco ondulea suelto por el viento y cuando se gira hacia mí sonríe y estira la mano en mi dirección.

-No me dejes, no dejes que me lastime- ruega.

Y de golpe algo tira de ella y la aleja de mi.

Eso hizo que me despierte agitado y con una angustia que oprime mi pecho.

-Sabes que debemos buscarla- dice Conor - por algo te mandan esos sueños los dioses.

-Conor no vamos a pasar por eso de nuevo - advierto.

-Si ellos decidieron que es el momento no vas a poder evitarlo.

Bufo enojado, más conmigo mismo que con mi lobo, pero se que es verdad, si los dioses me mandaron otra luna no voy a poder hacer nada para no reclamarla y enamorarme de ella.

Nuestro destino está sellado por los mates y que me regalen una segunda oportunidad seria un milagro.

-Sahara nos amaba, estoy seguro que ella la mando para nosotros- afirma y me duele el corazón.

No logro dormir y entonces salgo de la casa y dejo que Conor tome control de mi cuerpo y salimos a correr y recorrer la zona para asegurarnos que todo esté tranquilo.

A lo lejos veo una mujer pelirroja que está en los límites de mi manada y corremos enojados, nadie puede entrar a la manada. Cuando estamos próximos su olor nos delata que no es una loba, es una bruja y me preocupo. Hace años que rompimos relación con los brujos.

-¿Que queres? - digo transformandome de nuevo en mi versión de hombre.

-El momento llego, tenes que estar listo para protegerla- afirma.

-¿A quien? ¿Quien te mando?

-Todo a su tiempo Bolton, solo quiero que sepas que tenés una misión, una más importante que tu manada. Una que afecta el destino de todas las especies.

Y así empieza a alejarse de nosotros, corro hacia ella pero se esfuma en el aire y pierdo el rastro de ella.

-¿Que carajo fue eso?- digo confundido.

-Justo cuando tenés esos sueños, no es coincidencia - afirma mi lobo.

Volvemos más confundidos y frustrados que cuando salimos a correr.