Capitulo 36

Una semana sin que Karim viniera a verla.

Los trabajadores del castillo solían traerle comida. A pesar de que la jaula era bastante grande. Claramente le podía hacer daño a las piernas, y a la espalda. Era el mismo Elian quien solía venir a sacarla un rato para que ella estirara las piernas y caminara un poco por la habitación. Como si fuera un perro. Qué horror.

Y a pesar de que había querido hablar con él. Explicarle cosas, y preguntar otras, este solo negaba con la cabeza y rechazaba toda interacción.

No le dirigía la palabra.

Quizás eso había sido una orden...

-¿Cuánto tiempo más pasare aquí?

Nada. Nada como siempre. Después de una semana debería rendirse de que este le hablara

Suspiro y miro hacia el suelo

-Si va a matarme debería hacerlo ahora… prefiero morir a pasar el resto de mi vida encerrada…

Elian no dijo nada.

-Bien. No me hables. Pero al menos dime, con la mano. ¿Cuánto tiempo más durara mi encierro?

Sus ojos verdes se mantuvieron inexpresivos. Él estaba usando su usual
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App