-¿Elian ya se fue?
-Se acaba de marchar- respondió la chica del vestido color vino
-Karim se toma muy enserio esto eh. Manda a ese tipo todos los meses solo para asegurarse de que tu estes bien y que tu recuperación marche al cien
-No tiene por qué hacer eso. Yo ya estoy curada. Lo estuve desde el primer momento en que abrí los ojos hace un año atrás.
-Ha pasado mucho tiempo desde aquello -recordó Fell. -me parece increíble la negativa del rey de Regnoll a volver a verte
-Debe tener sus razones
Arista parecía ya no afectarle, pero Fell sabía que no era cierto. Ella se había quedado no porque no tuviera otro lugar a donde ir, sino porque había dado su palabra a una promesa.
-Ya he mandado más cartas a mi madrastra
-Vi que el juicio se llevó a cabo. Le dieron el perdón a tu padre. O bueno. Tu no padre. Tú me entiendes ¿no?
-No tienes por qué esforzarte. Además, les he confesado la verdad a ellas sobre lo que mi madre hizo. Apuesto que están ansiosas por reunirse todos nuevamente. Son un