EXTRA VI. CAYENDO EN LA TRAMPA
NARRADORA
Victoria casi tuvo que rogarle a su padre para que no la obligara a quedarse en una de sus sesiones de aprendizaje “papá y niña”.
¡Que ya era muy vieja para eso!
Gracias a todos los cielos que su madre sí la entendía mejor y “entretuvo” al príncipe vampiro para que ella escapara con sus primas.
Amara miraba nerviosa desde la colina a las luces más abajo de la ciudad, que estaba dominada principalmente por hechiceros y vampiros.
Se podía ver también algún que otro hombre lobo, principalmente en la noche, por la vida nocturna movidita de las tabernas y sitios de “desahogo”.
—Manos a la obra, entonces —Nyx suspiró, repasando cómo se había metido en esto.
Sacó un frasquito de pócima que preparó y se lo pasó a Amara.
—Bébelo y te diré las palabras para deshacer el embrujo —se lo pasó a Amara, que lo tomó asintiendo.
—Buscaré a los gemelos para sacarles información…
—Ellos te van a descubrir, no tienen un pelo de tontos, lo sabes, sobre todo Magnus. Cuéntales en secreto, seguro