92. UN PACTO CON LA OSCURIDAD
LAVINIA
«Andaba en sus últimos días andrajosa y divagando, hablando sola con Electra, gritándole, peleando con una sombra.
Mandó en silencio a construir esa puerta, selló los secretos del corazón moribundo bajo el castillo y erigió su propia tumba.
Me vi caminando por ese mismo sendero de piedras pulidas, bajo esa caverna y observándola sentada en ese trono con la daga en la mano.
—Así que ya te dejas de esconder como una rata… —me asombré dando un paso atrás cuando levantó la cabeza y fijó sus ojos en mí.
¿Acaso me podía ver ahora? Pero no…
—Electra —agregó y al momento, una sombra espectral me atravesó desde atrás, dándome una sensación espeluznante.
La vi avanzando hacia Drusilla.
No lucía como los espectros de Silas o Laziel, donde la forma humanoide apenas se podía distinguir; no, este espectro había evolucionado aún más.
Formada de niebla oscura, apareció la hermosa mujer de cabello corto y ojos llenos de odio y rencores.
No decía una palabra, solo miraba la escena al igual qu