Jessica se puso furiosa: —Nicolás, encima la defiendes.
Nicolás miró a Samantha: —Levántate.
Samantha se puso de pie: —Señor Duque, gracias.
Nicolás: —Me falta una secretaria. Ven al grupo Duque a ser mi secretaria.
Nicolás hizo que Samantha fuera su secretaria.
Jessica no podía creerlo: —¿Nicolás, le vas a dar el puesto de secretaria?
Daniela viendo esta escena también se sorprendió. Toda la gente alrededor de Nicolás eran hombres, nunca había tenido una secretaria mujer. Ahora excepcionalmente le daba el puesto a Samantha.
Mauro se rio: —Daniela, parece que el señor Duque sintió compasión por esta Samantha.
Daniela sintió dolor en el corazón.
Samantha estaba felicísima por dentro e inmediatamente curvó los labios rojos: —Gracias, señor Duque. De ahora en adelante voy a trabajar muy bien y voy a obedecer al señor Duque.
Nicolás asintió: —Mmm.
Samantha se sentó al lado de Nicolás. Le sirvió vino obedientemente: —Señor Duque, le sirvo vino.
Los ejecutivos a su alrededor se rieron: —Nunc