92| Pensamientos enfermos

El auto se detiene frente a mi edificio. Suspiro porque he sobrevivido. Apenas. Mis piernas están juntas, firmes, como si al mantenerlas así pudiera negar que algo acaba de fallar de forma estrepitosa. Literalmente. La costura de mi falda, rota justo en el muslo, amenaza con delatar mi más íntimo intento de seducción.

Miro hacia la puerta, lista para huir con lo poco que me queda de dignidad, pero entonces siento la mirada de Edward sobre mi.

Baja, despacio. Desde mi rostro hasta mis piernas. Y ahí se queda. Justo donde la tela se abrió sin permiso. Donde mi piel canela se asoma descaradamente bajo la luz tenue del farol. Donde el encaje negro de mis bragas se dibuja como un secreto que no debía descubrirse.

Su mirada no es fugaz. Es una pausa. Una maldita pausa. Y yo no sé si es lástima, repulsión… o deseo.

No quiero preguntarme eso, pero mi estómago da vueltas. Mi piel se eriza. Me siento atrapada entre la humillación y algo mucho más retorcido.

Edward carraspea. Su voz es
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App