El espectáculo de Yeison le había revelado a Jairo mucha información sobre lo que ocurría tras bambalinas.
— Si Yeison solo tiene esa cantidad de capital disponible, y además lo ha invertido todo en piedras que hemos ganado nosotros… es una oportunidad única — reflexionó Jairo. — Podemos aprovechar su pésima reputación para atacar sus empresas. Sin suficiente capital para reponer su inventario, y bloqueando sus posibles vías de financiación, podemos expulsarlo del negocio del jade para siempre.
Como hombre de negocios y como competidor, Jairo no iba a tener ningún miramiento con Yeison. Aprovecharía su debilidad para acabar con él. Si le dejaba alguna posibilidad de recuperarse, Yeison podría vengarse, y entonces Jairo y su familia serían los que pagarían las consecuencias.
— ¡Don Jairo, esta es la oportunidad perfecta para acabar con Yeison! ¡Hay que asegurarse de que no pueda volver! — Billy asintió con la cabeza, mostrando su acuerdo.
Yeison huyó despavorido, sin siquiera mirar