Aitana sonrió y levantó la copa de champán que tenía en la mano:
—Hola, señor Mesa.
Volteó hacia Damián y le dijo:
—El señor Mesa del Grupo Integra Universal tiene mucho poder en Palmas Doradas.
Álvaro se rio a carcajadas:
—Señorita Balmaceda, me halaga demasiado.
Mientras hablaba, examinó a Damián. Seguía siendo apuesto y elegante como siempre, pero le faltaba mucha presencia. Damián sin memoria era como un tigre sin dientes, nada que temer. Que Aitana lo trajera al círculo de élite era ridículo.
El señor Mesa lo despreciaba, así que fue descortés en sus palabras. A propósito ignoró el saludo de Damián y se burló sutilmente:
—Escuché que el señor Uribe empezó hoy, probablemente no estaba preparado. Esta noche es una cena formal que tiene requisitos de vestimenta para los hombres, por lo menos no puede faltar la corbata. El atuendo del señor Uribe se ve algo... casual.
Antes de que Aitana pudiera responder,
Damián con cara radiante dijo:
—Señor Mesa, tiene razón, fui descuidado. ¡Qué p