Sofia avanzó con un poco de timidez, Aidan la tomó del brazo para entrar junto ella, como queriendo mostrar quien era él. blanca apenas lo vio frunció el ceño y revoleo los ojos. No había manera que ella lo aceptara.
Alex como siempre, vivaz e inquieto se les adelantó para llegar a Fernando.
_ ¡Padrino! _ corrió con sus bracitos abiertos.
Fernando se agachó y el pequeño lo atrapó por el cuello. Milena lo miró fijamente y entrecerró los ojos.
_ Y tú, ¿Quién eres? _ se cruzó de brazos.
Alex se giró hacia ella y sonrió con extrema simpatía.
_ Soy Alexander O´Neill ... ¿y tú?
_ Milena Ponce de León y Fernando es mi tío _ le dijo con seriedad.
_ Oh, y es mi padrino _ dijo el niño con espontaneidad, sin importarle la actitud hostil de Milena _. ¿Quieres jugar?
A la niña no le quedó otra que aceptar pues prácticamente, el pequeño la tomó de la mano y se la llevó a jugar.
Sofia y Aidan se acercaron riendo.
_ Lo siento, mi hijo suele ser demasiado sociable. _ dijo Sofia.