Al abrirlo, impecable y majestuosamente se encontraba el Corazón de Astra sobre una almohadilla, finalmente veían con sus propios ojos la mítica piedra robada.
— Tenías razón, James. — Mau mira a James con satisfacción.
— Adelante, tienes que colocarla sobre el pilar y ver qué pasa. — Comentaba Mau dando un par de pasos hacia atrás.
James se colocó delante del pilar y colocó suavemente el Corazón sobre su superficie…
Lentamente comenzó a iluminarse y a levantarse sobre el aire a la vez que brotaba a su alrededor una especie de nova, justo como las historias la describía.
De un momento a otro el santuario comenzó a moverse, el pilar se deslizó nuevamente a su posición y los escombros a en todo a su alrededor, en el suelo y en sus paredes volvió a su lugar como volviendo a atrás en el tiempo, las