Cora.-
Empezaba a odiar cada amanecer. Mi rutina era la misma todos los días: prepararme para mis terapias. La fisioterapeuta era una imbécil. No sé de dónde Julia la sacó.
Estaba empezando a pensar que mi hermana me odiaba y quería torturarme. Esa mujer era una mierda. No se conmovía con mi frustración.
Luego me encerraba en mi habitación, solo a esperar que llegue la noche para cerrar los ojos y olvidar mi tragedia.
Yo solo era una mancha… una sombra de tristeza y vergüenza en la vida de las personas que amo.
Aunque mis padres, al enterarse de todo lo que hice con Rob, no me culpen, yo sigo haciéndolo… porque estoy en esta puta silla de ruedas por mis malas decisiones.
(…)
FLASHBACK.-
Peter me lleva en sus brazos, lo que me avergüenza, pero prefiero que lo haga él.
Mi madre entra en la habitación rodando la silla de ruedas. Verla me hace entrar en un cólera profundo.
Odio esa maldita cosa.
Nunca fui una mujer dependiente y ahora… tengo que depender de ese puto aparato para moverme.