POV de Diego
El sol aún no había salido cuando abrí los ojos. No había dormido mucho, pero eso no era nada nuevo. En este negocio, el descanso era un lujo que no podía permitirme.
Adriana aún dormía a mi lado, su respiración tranquila contrastando con la tormenta en mi mente. Montoya había aceptado verme hoy, pero sabía que no lo hacía con buenas intenciones. Ese cabrón planeaba algo, y yo tenía que estar preparado.
Me levanté sin hacer ruido y me dirigí al baño. Me miré en el espejo: ojeras marcadas, una barba de dos días y la mirada de un hombre que no podía permitirse un solo error.
Montoya había cruzado la línea al reunirse con Nancy y Dave. Eso significaba que tenía su propio juego en marcha. Pero lo que más me jodía era no saber qué tan profundo llegaba su traición.
Salí de la habitación y encontré a Javier en la sala, tomando un café como si no fuera casi de madrugada.
"¿Listo para hoy?" preguntó sin rodeos.
"Lo estaré." Me serví un poco de café y me senté frente a él. "¿Alguna