Capítulo 59 —Un rato antes
Narrador:
Luego del beso entre Sasha y Eros, en el jardín...
Ambos se quedaron en silencio un instante. Eros fue el primero en apartarse, apenas un paso atrás, aún con la respiración agitada. Sasha lo imitó, aunque sus dedos temblaban un poco.
Él sonrió. No de burla ni ironía. Era esa sonrisa suya de rendición absoluta, de "no puedo contigo, pero tampoco quiero poder". Sasha se mordió el labio, miró su boca y soltó una risa baja.
—Tienes mi labial… —murmuró, estirando la mano y limpiándole la comisura con el pulgar. Lo hizo con cuidado, pero también con cierto descaro.
Eros la observó, y luego tomó su mentón con dos dedos. Le dio un vistazo fugaz a sus labios, ahora un poco corridos, y con el pulgar hizo lo mismo: le retocó el labial, aunque más lento, más provocador.
—Ya estamos parejos —susurró él, todavía con esa media sonrisa torcida que la desarmaba.
Agitados, nerviosos, excitados hasta el límite pero con esa complicidad que siempre les explotaba entre