Nicole mantiene una sonrisa maliciosa en los labios mientras observa a Rebecca. Las manos temblorosas de Rebecca intentan desesperadamente abrir la puerta, mientras Nicole la estudia, cuestionando cómo Alex pudo involucrarse alguna vez con alguien tan patética.
– ¿Necesitas ayuda para abrir la puerta, damisela? – Susurra provocativamente en el oído de Rebecca. – Pareces tan nerviosa, ¿qué pasó, ratita? – Provoca con un toque de sadismo, observando cómo la puerta finalmente cede y se abre.
Rebecca, ansiosa por librarse de la presencia amenazadora de Nicole, entra en su apartamento e intenta cerrar la puerta, pero Nicole la detiene con firmeza, empujándola con fuerza. Al entrar en el apartamento, Nicole trae consigo una atmósfera cargada de tensión y hostilidad, creando un escenario aún más angustiante.
– ¿Qué diablos piensas que estás haciendo? Sal ahora mismo de mi casa. – La voz de Rebecca temblaba de furia.
– Cierra la boca y cierra esa maldita puerta. Necesitamos tener una conversa