VIKRA:
Después de escuchar el plan de mi hermana Chandra Selene y Sarah, mi primer instinto fue correr hacia donde estaba mi hermano Vorn y contarle todo. Pero sabía que sería inútil: era mi palabra contra la de mi hermana, en quien ahora él confiaba plenamente. En mí, en cambio, persistían las sospechas. Por más que intentara convencerme de lo contrario, no podía aceptar que Elena fuera su pareja destinada. Si ella no lo era, entonces ni Claris ni Clara podrían ser sus hijas.
El aroma de Claris lo confirmaba, ese aroma que me atormentaba y me decía que era mi pareja destinada, aunque todos los demás lo negaran. Aguardé a que la noche cayera y, como cada día, corrí hacia el límite de la manda de Kieran Theron, esperando conectarme con ella. Aunque Claris nunca había respondido a mis llamados, la sentía. Esa energía, esa