Capítulo 21. Razones para mentir

Benjamín aún no había tomado asiento detrás del escritorio, por eso cuando escuchó las palabras del médico se dejó caer, al mismo tiempo que se pasaba una mano por el cabello, queriendo halárselo, solo que sus hebras ya estaban demasiado cortas para hacerlo.

—No entiendo, ¿Por qué no me informó desde el mismo momento cuando supo de los resultados? —interrogó frunciendo un poco el ceño, sin perder ni un solo detalle del rostro del médico.

—Usted no estaba al momento de hacerle la autopsia y los principales sospechosos son su círculo cercano, la policía me dio órdenes de no informar hasta que no apareciera usted, pero no quise molestarlo durante el sepelio, porque ese momento era íntimo con su abuelo para despedirlo.

—¿Qué le suministraron? ¿Fue un medicamento, sustancia química? Dígame ¿Cómo lo envenenaron?

—La autopsia reveló que le dieron a consumir El etilenglicol, un químico incoloro, inodoro y con sabor a dulce, que ingerido, es venenoso. Se lo dieron a tomar en un licor, no puedo
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo