En París.
Pasaron los días y llegó el momento de volar a París, Raquel muy emocionada, Amanda no pudo acompañarla, ella en el aeropuerto, ya que Daniel había tenido que viajar a Italia antes que a París.
Con un pantalón negro de vestir y una camisola de marca chanel color blanca, unos botines altos, un bolso pequeño de espalda, lentes oscuros y la boina que no podía faltar, iba Raquel rumbo a subir al avión, con la felicidad mas grande del mundo, se iría del país y las cosas se calmarían un poco.
El vuelo transcurrió sin mayor problema, era un vuelo directo en primera clase, ella no sabía nada de moda, así que una asesora contratada por sus padres la estaría esperando para salir de compras con ella.
Al salir de la manga, una mujer de mediana edad con un cartel que decía “señorita Raquel Collins” la esperaba.
-Hola, soy Raquel, que gusto, ¿Gloria verdad?, preguntó ella sonriendo.
-Que gusto señorita, así es, soy Gloria, seré su asesora de moda toda esta semana en París,
Raquel, que no había esta