C134- MÁTAME.
C134- MÁTAME.
Axel soltó unaa risa amarga que se transformó en tos.
—¿Escucharme? ¿Ahora?
La mazmorra estaba sumida en un silencio opresivo, roto solo por la respiración irregular de Axel, mientras Rowan permanecía de pie frente a los barrotes, observando a su amigo de toda la vida reducido a una sombra temblorosa.
—Mírate —dijo Axel de repente, con una sonrisa torcida en su rostro demacrado—. El gran alfa Rowan, tan noble, tan compasivo. Viniendo a visitar al traidor en su celda.
Su voz sonaba áspera, como si cada palabra raspara su garganta al salir y Rowan no respondió, solo sostuvo su mirada.
—¿Qué pasa? ¿El lobo alfa se quedó sin palabras? —continuó Axel, arrastrándose hacia los barrotes—. ¿O solo viniste a regodearte? A ver cómo el asqueroso Axel se arrastra por el suelo, suplicando por una gota de elixir.
Rowan apretó la mandíbula.
—No vine a burlarme de ti, Axel. Vine porque necesito entender.
Axel soltó una carcajada.
—¿Entender? ¿Tú? ¿Qué podrías entender tú sobre mí? Nunca