SEÑOR, SU ESPOSA... II
- ¿De qué se trata?
- Te lo puedo enseñar en tu habitación, ¡más concretamente en tu cama! - Me guiñó un ojo.
- No eres digno de mi polla. Prefiero pagar a putas.
- Necesito dinero. No soy tan feo. Podemos hacer negocios si quieres. Y piensa en el lado bueno... Ni siquiera tienes que salir de casa. Y no hay riesgo de que te lo robe o lo haga público... Sobre todo porque... Espero que esté lo suficientemente lleno como para que no pueda abrirlo. - Sus labios se entreabrieron en ese juego de seducción en el que estaba a punto de caer- ¿Puedes mantenerme la boca cerrada, Gabe? - Se mordió provocativamente el labio inferior.
De momento lo único que Olivia quería era darme un té de coño y hacerme adicto a ella. Así que follármela, por mucho que me gustara, ya no era una posibilidad. Aunque sólo fuera para demostrarme que ella no era nada de lo que ladraba.
- No tienes necesidades físicas, Chuchu... Es tu vena prostituta la que habla más alto. La probabilidad de que seas diferente a tu madr