[DANIEL]
(Día del arresto)
—Buen trabajo a todos, una cirugía exitosa más para sentirnos orgullosos del por qué somos doctores —dije, orgulloso de mi equipo.
Mientras todos aplaudían y chocaban las palmas con la persona que tenían al lado, yo miraba mucho más allá: un paciente que salía victorioso ante su lucha con la muerte. Miraba a una persona que sabía que tenía que volver, porque afuera había muchas personas esperándolo, que lo amaban y aguardaban buenas noticias. Vi a alguien fuerte, con un enorme apego a la vida, mientras que en mi equipo, los cuales eran practicantes de medicina a punto de graduarse, me vi a mí y a Axel cuando éramos más jóvenes, celebrando por una vida que seguía latente y porque amábamos lo que hacíamos.
Vi a una nueva generación que pensaba no solo en sí misma, sino en los demás, y eso era lo que los hacía grandes.
—Felicidades, chicos, la familia del paciente espera las buenas noticias. —
Salí del quirófano y, con todo el orgullo del mundo, le di la notici